jueves, 15 de noviembre de 2012

Si tu hijo te pide un libro... Lolo Ricó



Este libro escogí principalmente porque vi el índice y lo que encontré me gustó porque me imaginé que podría traerme recuerdos de viejas lecturas y a la vez podría orientarme sobre otras que no he leído y hacérselas leer a mi hermana pequeña e incluso para mi misma. 

El libro comienza a hablar un poco de la lectura. Tengo que decir que tiene toda la razón del mundo en todo lo que dice porque es cierto que la sociedad a cambiado y sobretodo con la televisión lo que hace que se lea poco. Yo misma lo compruebo eso en mi casa al tener a una niña pequeña cerca de mí y ver que se pasa el día viendo la televisión o viendo vídeos en Internet. No dedica mucho tiempo a la lectura a no ser que me vea a mi o que nos pongamos a leer con ella tanto mi padre como yo. 
Lo que más me ha sorprendido de esta primera parte es cuando habla del fracaso escolar, como hay gente que sabe leer pero no comprende lo que lee y depende de otras personas para que hagan su trabajo, sobre todo en EEUU. Me impacta más que sea allí siendo una gran potencia como es.

A continuación, el libro se divide en tres partes principalmente. Por un lado tenemos los libros dedicados a los pequeños de la casa, después una etapa intermedia y por otro a los adolescentes. Luego hace otra subdivisión entre primer estante, segundo estante y tercer estante. Estas divisiones están relacionadas porque los libros para los más pequeños están centrados en el primer estante de donde destaca los cuentos de los hermanos Grimm. Se piensa que hay que leerles a los niños desde que son pequeños porque la lectura es muy importante pero no está muy a favor de los libros – juguetes porque si de pequeños los meten en la bañera, en el caso de los libros de tela o de plástico, cuando se les de un libro impreso de papel cree que harán lo mismo, meterlo en la bañera para jugar.

En el segundo estante o estante intermedio no dice que se tenga muy claro la división de qué libros pertenecen a una edad o a otra porque habrá niños que desde pequeños hayan leído y les hayan leído mucho y estén más habituados a la lectura y otros que todo lo contrario. En esta etapa no conviene olvidarse de los cuentos que conocen de las etapas anteriores sino que ahora los libros van a estar centrados en cosas que conocen porque las tienen a su alrededor como puede ser la familia, la comida.

Para empezar las recomendaciones que da la autora lo primero que me llamó más la atención fue el libro de Lewis Carrol, Alicia en el País de las Maravillas. A mi en particular este libro me lo leían y me lo he leído recientemente y al tener fragmentos con el posterior comentario de la autora hace que entren ganas de leerlo de nuevo. Además, que la propia Lolo destaca que este libro puede leerse tanto cuando eres un niño como un adulto.

El siguiente capítulo que me llama la atención es en el que habla de Kasperle. Como bien dice la autora recuerda a Pinocho y a los niños les gusta leer cosas sobre niños rebeldes.

Otro que me pareció impactante fue el de Celia de Elena Fortún.  Pienso que está bien que los pequeños lean eso pero que incluso con mi edad puede perturbar un poco leer algo tan fuerte como puede ser un libro relacionado con la Guerra Civil.

El Rey Matías a mi me ha llamado mucho la atención porque plasma perfectamente la visión que tienen los niños de los adultos. Los ven como los malos y ellos son los buenos.

Otro que destacaría es el de Harry Potter y la Piedra filosofal y como la autora dice enterarse de esta saga tan importante, por lo menos para mí. Es verdad que cuando acabas cada uno de los libros de J. K. Rowling te quedas con ganas de más y te da hasta pena que se acabe el libro y quieres más y más aventuras de Harry. Yo personalmente recomendaría esta lectura a cualquiera.

Ahora ya paso a la parte de los adolescentes y con ellos al tercer estante. Los adolescentes no suelen leer mucho debido a varias razones como son en primer lugar las lecturas obligatorias. A uno no le gusta que le obliguen a leer y abandona la lectura. Por otro lado está la televisión. Hay niños que se pasan el día pegados a la televisión, sin pestañear y se olvidan de todo lo demás (mi hermana es un claro ejemplo). Cuando la veo así de pegada, porque es como está, la intento convencer de que haga otra cosa, jugar, leer, lo que sea, pero es (la mayoría de las veces) prácticamente imposible. De las lecturas para adolescentes lo que me he dado cuenta es que la mayoría son obras autobiográficas contadas por los autores de una manera entretenida. Hacen que parezca ficción la realidad y eso es un trabajo bastante difícil por el que yo creo que tienen bastante mérito.

De todos los que hay yo destacaría El Diario de Anna Frank porque muestra hechos históricos y reales. Y en consecuencia de esto, impactantes porque hacen ver la dureza de hechos sucedidos en el pasado.

Personalmente en conjunto el libro me ha gustado bastante porque no solo te recomienda unas lecturas y el porqué de sus recomendaciones, sino que además aparecen fragmentos por lo que en algunos casos no en todos puedes coincidir con la autora en las recomendaciones. Además, muchas de las lecturas que son recomendables y no conocía pienso que son interesantes y me ha servido para apuntarme lecturas pendientes. 

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